TEXTOS DE MAESTROS

REFLEXIONES  DEL MAESTRO  SUN LU TANG SOBRE LOS CONCEPTOS DE LOS ESTILOS  INTERNOS Y EXTERNOS EN EL ARTE MARCIAL



Fragmentos de un manuscrito  escrito por Sun Lu Tang en 1929 



Tanto si se practica con suavidad para llegar a la dureza, o desde la dureza para llegar a la suavidad, o aunque se separe lo duro de lo suave el resultado será el mismo.

La aplicación en las artes marciales reside en la armonía; esta armonía nos otorgará el conocimiento adecuado para poder obtener la valentía necesaria.

Al practicar artes marciales, cada día acumulaba mi energía interna en el Dantien, para que  mi vientre llegase a ser duro como una roca, pensaba que si lograba estimular esta energía dentro de mi abdomen, podría ser capaz de lanzar a un adversario a tres metros de distancia. Pensaba que si podía hundir y acumular la energía, conseguiría obtener la potencia refinada interna (Nei Jin) de las artes marciales, y que si un practicante no conseguía llegar a hundir su energía en el Dantien del abdomen, entonces estaba practicando estilos externos.

Un día viajé a la región del rio Jin para encontrarme con el honorable maestro Song Shiron, después del tradicional intercambio de saludos, le pregunté por la diferencia entre interno y externo.

El maestro Song dijo: el acto de respirar se divide en interno y externo, pero las artes marciales no pueden separarse en internas y externas. Cuando alcanzas la perfección en el arte de nutrir tu energía( yang qi ) entonces podrás decir que practicas un estilo interno. Pero si no sabes cómo llegar  a nutrir tu energía, entonces deberás practicar hasta llegar a comprender el sentido más profundo de lo que significa el concepto de estilo interno.

En la práctica de las artes marciales, la quietud se halla dentro del movimiento, mientras que en la meditación sentada es el movimiento el que está implícito en la quietud. El hecho es que existe quietud dentro del movimiento y viceversa; ambas forman una sola unidad y no se puede decir que sean cosas separadas, cuando la quietud llega a su límite genera movimiento y cuando el movimiento alcanza su punto álgido, aparece la quietud, por consiguiente movimiento y quietud se generan mutuamente. Es por eso que si realizamos una división entre lo interno y lo externo, caemos en una equivocación.

¿Qué  diferencia hay entre hacer circular y no circular? Pensemos en alguien que no practica artes marciales, normalmente su respiración llegará solamente hasta la parte central de su tórax, se detendrá allí y regresará por el mismo camino con lo que su energía interna flotara hacia arriba. A esto me refiero cuando digo que la respiración no circula. Su energía interna y su circulación sanguínea se moverán solamente en la parte alta de su espalda; se sentirá libre y luchará como un lobo, pero su energía interna se convertirá en fuego, mostrará demasiada rigidez y sobrepasara los límites.

Por el contrario si consigue movilizar su respiración hacia abajo, hasta hacer que llegue hasta su Dantien, con el tiempo logrará hacer que las energías del corazón y los riñones se encuentren; con lo que el fuego y el agua formarán el hexagrama llamado ji ji.
Si el fuego de la energía interna no llamea hacia arriba, la respiración se irá haciendo natural y no se estancará en el centro del pecho, antes de dar la vuelta y volver a salir, esto indicará que la respiración alcanza la parte inferior del tórax.

El cuerpo y la energía interna son una misma cosa y es un error pensar en ellas como dos cosas diferentes

Tener es lo mismo que no tener, la plenitud es lo mismo que el vacio.

En la práctica de las artes marciales, el Centro y la Armonía tienen mucha importancia, aunque también la tienen la benevolencia y la equidad. Si no comprendemos este principio con claridad diáfana, aunque entrenemos duramente hasta alcanzar la velocidad de un pájaro en pleno vuelo y aunque podamos alzar un peso de cinco mil kilos, nuestra habilidad no irá más allá de lo que puede mostrar cualquier persona valiente, y en definitiva no podremos apartarnos todavía de lo que es un estilo externo.

Pero si en tu práctica buscas alcanzar el Centro y la Armonía entregándote felizmente a la comprensión de la benevolencia y la equidad, tus movimientos se realizarán de acuerdo a la tradición, comprendiendo así el significado de cada gesto.
Quizá no tengas fuerza para mover cincuenta kilos, pero entonces si se podrá decir que perteneces a los estilos internos.

Si practicamos profundamente hasta llegar a dominar la manera de nutrir  nuestra energía interna, entonces podremos unir lo interno y lo externo pudiendo comparar el tener y el no-tener, hasta llegar a ser extremadamente poderoso y extremadamente duro.
Practicando el cultivo energético de forma perfecta, sin temor a ninguna calamidad, cualquier lugar nos otorgará el “tener”; cualquier momento nos dará el tiempo exacto.

Envolviendo o expandiendo nuestra energía, nuestra esencia parecerá muy sutil, y nuestras aplicaciones serán innumerables.
En realidad tanto lo externo como lo interno comparten los mismos principios.

Yo me he dedicado a escuchar respetuosamente y por fin he he empezado a comprender que el camino de las artes marciales (Quan dao) es el mismo que el camino del cielo (tian Dao) y este es el mismo que el camino de la humanidad (ren dao). También comprendí que aunque las posturas de los distintos estilos marciales fuesen distintas todas compartían el mismo principio.

De todo esto podemos deducir que en el habla debemos mostrar paz y tranquilidad; en los gestos expresar espontaneidad y naturalidad. En todas partes he comprobado que la sinceridad representa el centro de todo, mientras que la apariencia reside en el exterior.

Además el maestro Song comentó: Las artes marciales también pueden cambiar la materia y la energía interna del ser humano.

Sun Lu Tang 1929